Tras la trágica pérdida de su hijo, Ellen y Martin Shaw se trasladan a una casa en el campo donde esperan rehacer su vida. Ellen se dedica a decorar la casa, que ha estado deshabitada durante veinticinco años, y Martin a escribir. Pero las cosas empiezan a cambiar. Ellen tiene misteriosas visiones de su propia muerte y Martin reacciona ante todo cada vez con más hostilidad. La casa esconde un escalofriante secreto que Ellen intentará descubrir a toda costa.