Largometraje familiar en el que un niño de una familia que acaba de mudarse a una casa Victoriana, descubre que, entre sus paredes, habitan unas personas diminutas, que miden apenas un palmo. Estos diminutos seres, vuelven locos a todos los habitantes de la casa, ya que se dedican a “tomar prestado” de ellos, todo tipo de objetos, como tijeras, dedales, etc.,.. Esto provoca un tremendo desconcierto, pues no saben cómo desaparecen.