Edad Media, Siglo XIII. El veneciano Marco Polo no sólo fue un brillante explorador, sino que abrió una ruta comercial, que hizo posible el intercambio cultural entre China y Europa. El intrépido veneciano viajó a Oriente y consiguió ganarse el favor de Kublai Khan, que lo nombró su consejero. Durante los dieciséis años en que sirvió al Khan, conoció no sólo las vastas regiones de China, sino también los grandes avances de esa civilización. Cuando un embajador persa le pide a Kublai Khan una princesa para su rey, Polo decide acompañarla y aprovecha el viaje para regresar a Venecia.