Albertano continua triste porque María de todos los Ángeles, aún no ha despertado. El chino ve una película en la que un enfermero embaraza a una paciente y la saca del coma; el chino le cuenta esto a Albertano a quien se le ocurre hacérselo a María. Y aunque le pide a Betzabé que guarde el secreto, rápidamente se hace chisme, Doña Lucha tortura al Chino con licuado de Papa Antonio, usándolo como suero de la verdad para que le diga que traman. Albertano logra despertar a María pero el irá a la cárcel.